Este cuento corto está dedicado para quienes consciente o inconscientemente están inmersos en una lucha interna consigo mismos.
Una noche fría de invierno estaba un anciano Cherokee con su nieta; la niña le había pedido con insistencia que le contara una historia antes de dormir como lo hacia todas las noches. El anciano empezó a contarle que dentro del ser humano existe una batalla eterna entre dos lobos. Uno de ellos representa todo lo malo dentro de uno mismo: la maldad, ira, codicia, el miedo, los celos, resentimiento, inferioridad, la mentira y el ego. El otro todo lo bueno: la paz, felicidad, amor, esperanza, la fortaleza, la valentía, humildad, empatía, verdad y bondad. La nieta preocupada le pregunta: Abuelito ¿y que lobo ganará? y el viejo responde con tranquilidad: Ganará el lobo que alimentemos más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario